Cuatro cuadras de diferencia separan dos tragedias en el barrio de Villa Crespo con una característica en común: la muerte de obreros sepultados bajo los escombros. Dos hermanos de nacionalidad paraguaya murieron ayer al derrumbarse una medianera de la obra en construcción en la que trabajaban. Ocurrió a 400 metros de donde, en septiembre del año pasado, otro obrero falleció en condiciones similares.
Las víctimas de ayer, de 30 y 32 años, trabajaban en la obra de Virasoro 1638, mientras que el derrumbe de 2016 fue en Remedios de Escalada 546. El escenario de la tragedia de ayer había sido denunciado por la Uocra el 11 de julio pasado ante la Dirección de Protección del Trabajo del Gobierno de la Ciudad por "incumplimientos de las medidas de seguridad e higiene previstas por la normativa vigente", según explicaron voceros del sindicato en un comunicado.
La Uocra solicitó "afianzar las partes inestables de la construcción, apuntalar los muros medianeros y colocar una pantalla de protección contra la caída de objetos". Desde el organismo oficial indicaron que la inspección se realizó el 12 de septiembre. Se hallaron irregularidades menores que fueron intimadas, pero no las denunciadas por el sindicato.
Por otra parte, la Agencia Gubernamental de Control informó que la obra no había recibido denuncias de vecinos y que desde que empezaron los trabajos de demolición, el 26 de junio, se realizaron cinco inspecciones, sin encontrarse anomalías.

La Nacion